Genaro García Luna: de súper policía a súper narco

“El acusado era supuestamente la persona encargada de combatir al Cártel de Sinaloa. La realidad, sin embargo, es que era su colaborador más valioso”.

Philip Pilmar (Fiscal asistente).

FUENTE ORIGINAL

El pasado 10 de diciembre de 2019 fue detenido en Texas, Estados Unidos, Genaro García Luna, quien de 2001 a 2006 estuvo al frente de la Agencia Federal de Investigación (AFI) bajo la presidencia de Vicente Fox y posteriormente fue secretario de Seguridad Pública durante el sexenio de Felipe Calderón Hinojosa (2006-2012).

La orden de captura se materializó en el suburbio de Grapevine, misma que derivó del juicio que se llevó a cabo, también en Estados Unidos contra Joaquín “el Chapo” Guzmán, líder del Cártel de Sinaloa y sentenciado a cadena perpetua el mismo año de la detención de García Luna.

Los cargos

García Luna es acusado de narcotráfico y de aceptar sobornos millonarios por parte del Cártel de Sinaloa. La fiscalía estadounidense argumentó que, a cambio de dinero, García Luna permitió que el Cártel de Sinaloa operara con impunidad en México, ayudó a los traficantes a transportar drogas de manera segura y sin la intervención de ningún tipo de autoridad hacia el país del norte y que incluso llevó a cabo ataques contra carteles rivales.

El exfuncionario enfrentó varios cargos de participación en una empresa criminal y otros de conspiración para obtener, importar y distribuir miles de kilogramos de cocaína en Estados Unidos, además de presuntamente haber hecho declaraciones falsas a funcionarios estadounidenses de inmigración. Sin embargo, García Luna se ha declarado inocente de todos los cargos.

La guerra contra el narcotráfico

Pero antes de continuar con el juicio, que recientemente ha llegado a su fin sólo a la espera de sentencia, en el que García Luna ha sido declarado culpable de todos los cargos, es importante regresar un poco en el tiempo y echar un vistazo a la supuesta guerra contra el narcotráfico, que fue lanzada por Felipe Calderón en 2006 y continuada por el gobierno de Peña Nieto hasta 2018.

La dichosa guerra marcó el inicio de la administración de Calderón, que cabe enfatizar llegó de la mano de un escandaloso fraude electoral contra el actual presidente de la República Andrés Manuel López Obrador (AMLO). Por lo tanto, su gobierno no contaba con la simpatía de la mayoría de la población, dicho de otra forma, se puede mencionar que su gobierno era muy débil.

Para muestra un botón. El día en que asumió el cargo, la sede del poder legislativo en San Lázaro parecía más un bunker en medio de una guerra que el sitio en el que un presidente “electo” tomaría protesta. La tribuna estaba tomada por los diputados del Partido Acción Nacional y afines. Pero, por otro lado, había mantas en las que se mencionaba que Calderón era un usurpador y un espurio. Asimismo, se corrió el rumor de que Calderón no ingreso por la puerta principal del recinto legislativo, sino por la puerta de atrás. La toma de protesta marcaría significativamente su gobierno.

Desde La Izquierda Socialista dijimos que la guerra contra el narco no era tal cosa, sino tan solo un pretexto para sacar al Ejército a las calles y frenar la lucha de los trabajadores contra el espurio de Calderón. Durante su sexenio se fue percibiendo que no era una guerra del gobierno contra los cárteles de la droga sino, más bien, del gobierno contra algunos grupos del narco, en los que algunos se veían beneficiados, entre ellos el Cártel de Sinaloa.

Al inicio de la gestión calderonista en México eran bastantes grupos los que pugnaban por el control de plazas y el trasiego de drogas hacia Estados Unidos, pero para el final de su mandato el 80% del tráfico de drogas recaía tan solo entre dos grupos que combatían entre sí: el Cártel de Sinaloa y los Zetas.

En un artículo de la BBC, publicado en 2012, exponen como se dio el crecimiento de lo que ellos llaman la Federación de Sinaloa, en los seis años del gobierno de Calderón.

“En 2006 este grupo operaba en cinco estados. Ahora su influencia se extiende a 16 de las 32 entidades del país.

“El cartel, encabezado por Joaquín Guzmán Loera, ‘El Chapo’, e Ismael Zambada, ‘El Mayo’, emprendió una cruenta guerra con otras organizaciones para controlar especialmente la frontera con Estados Unidos, lo cual consiguió en 2010.”

“La Federación de Sinaloa desplazó al cartel de Juárez, que controlaba el tráfico en Chihuahua y Durango, al norte, y tenía grupos operativos en Quintana Roo, al sureste.”

“También se apoderó del territorio del cartel de Tijuana, en Baja California, y que había sufrido daños importantes en su estructura tras la muerte y captura de casi todos sus fundadores, los hermanos Arellano Félix.”

“Al mismo tiempo estableció alianzas con varios grupos, como Los Caballeros Templarios y el cartel del Golfo, e impulsó el nacimiento de otros como el llamado cartel de Jalisco Nueva Generación, que de acuerdo con especialistas se ha convertido en el brazo armado de la Federación.”

“Pero su actividad no se limita a México. Informes del gobierno de Estados Unidos y la Oficina de Naciones Unidas contra la Droga y el Delito (Unodc) indican que la organización de Sinaloa mantiene presencia en países como Argentina, Ecuador, Perú, Panamá, Costa Rica y Guatemala.”

“También se han encontrado personas vinculadas a la Federación en Australia y Malasia, así como en algunos países de Europa”.

De esta forma podemos ver claramente que la “guerra contra el narco” se enfocó en quitarle la competencia al “Chapo”, más que combatir realmente la siembra, cosecha y tráfico de drogas, pues logró una expansión muy relevante, no solo en México sino a nivel mundial. Ahora sabemos que tal éxito se debe también al apoyo que dio el súper policía Genaro García Luna (quién empezó a operar dentro de las altas esferas del Estado desde el sexenio de Fox) y por el cual recibió cantidades ingentes de dinero.

Por otra parte, la guerra significó un enorme derramamiento de sangre, no solo por las ejecuciones que corrieron a cargo de los grupos delincuenciales en pugna, sino también por los daños colaterales, en los que fallecieron cientos de civiles tan solo por encontrarse en el lugar y momento equivocado. A estas cifras hay que agregar a los desaparecidos, que también se cuentan por miles.

Rápido y Furioso

La guerra supuso la necesidad de adquirir armamento, ya que los grupos delictivos se encuentran bien armados y equipados (se sabe que han logrado blindajes contra las armas del Ejército e incluso que han creado submarinos para traer cocaína de Colombia).

Y cómo parte de la Iniciativa Mérida, un acuerdo bilateral entre los gobiernos de México y Estados Unidos, que se echó a andar en 2008 y cuyo principal objetivo era «contrarrestar la violencia alimentada por las drogas». Desde 2008 hasta 2020, Estados Unidos asignó más de 3,200 millones de dólares en equipo, capacitación y apoyo al desarrollo de capacidades a través de la iniciativa, según la Casa Blanca, todo eso se desarrolló durante la presidencia de George W. Bush.

Y entre 2009 y 2011, ya bajo la administración de Barack Obama, se acordó implementar el operativo “Rápido y Furioso” bajo el cual se permitió el ingreso de armas con un chip a territorio mexicano para saber su destino y actuar en contra de los delincuentes.

Aproximadamente se calcula que alrededor de unas 2,500 armas ingresaron a México, las cuales iban a ser rastreadas. Sin embargo, cientos de armas terminaron en manos de integrantes del crimen organizado.

De acuerdo con la Fiscalía Especializada en Materia de Delincuencia Organizada (FEMDO) el Cártel de Sinaloa, fue “la organización delictiva destinataria de las armas”. Aunque también otras fueron beneficiadas como Los Zetas y el Cártel del Golfo.

Las autoridades estadounidenses reconocieron que fue una operación fallida, pero Calderón hasta ahora no ha reconocido ni siquiera “los acuerdos” de dicha operación. Sin embargo, la Fiscalía General de la República obtuvo órdenes de aprehensión en contra de siete personas, entre ellos ex mandos policiacos y de justicia del gobierno de calderonista, entre esas personas estaba Genaro García Luna, Luis Cárdenas Palomino y Joaquín Guzmán Loera.

Ahora los cabos se comienzan a atar y podemos ver claramente que las acciones del gobierno de Calderón estuvieron encaminadas no a combatir a los cárteles de la droga, sino a apoyar al Cártel de Sinaloa en su lucha por hacerse de territorios, así como del control del tráfico de drogas hacia Estados Unidos.

El juicio y las declaraciones

Genaro García Luna ha sido declarado culpable de los cargos que se le imputaban en el tribunal en la ciudad estadounidense de Nueva York. Después de varios días de deliberaciones en los que desfilaron prominentes narcos como testigos, el jurado determinó la culpabilidad del brazo derecho de Fox y Calderón, ahora sólo se espera la sentencia, aunque eso es lo de menos, pues ya se ha evidenciado la podredumbre de la supuesta “guerra contra el narco”, como la corrupción que logró alcanzar a funcionarios de alto rango como García Luna y Cárdenas Palomino, preso en nuestro país.

Entre los testigos que declararon en contra de García Luna se encuentran a Sergio Villarreal Barragán, “El Grande”; Jesús Reynaldo, «El Rey» Zambada; Edgar Veytia, «El Diablo», Édgar Valdez Villarreal, “La Barbie”; así como Óscar Nava Valencia, alias “el Lobo”; entre otros más.

Por cuestión de tiempo y espacio, abordaré algunos de los testimonios, solo para dejar en claro el actuar de García Luna, dado que mencionar las declaraciones de todos los testigos es una tarea que sobrepasa el presente artículo.

En su declaración “El Grande”, mencionó que corromper a García Luna fue “la mejor inversión [que el Cártel de Sinaloa] pudo haber hecho con su dinero”. “No teníamos ningún tipo de problemas”. El testigo también declaró que, en varias ocasiones, presenció cómo García Luna aceptaba sobornos mensuales de un millón de dólares por parte del Cártel de Sinaloa, dinero que habría sido reunido por los hermanos Beltrán Leyva. También mencionó que mientras García Luna seguía reuniéndose con los Beltrán Leyva, Calderón elogiaba sus esfuerzos en la guerra contra las drogas.

«El Rey» Zambada fue el jefe del Cartel de Sinaloa en Ciudad de México de 2000 hasta su arresto en octubre de 2008. Él mencionó que cuando se enteraron de que García Luna sería el secretario de Seguridad Pública le ofrecieron 3 millones de dólares para platicar y que posteriormente en una segunda reunión se le habían entregado 5 millones más.

Como jefe del cartel en la Ciudad de México, él se quedó con el control del Aeropuerto Internacional de la Ciudad de México (AICM). “El Rey” dijo que “No podía trabajar sin esa ayuda… era una forma muy segura de trabajar”. Relató que había tres formas para el envío de las drogas; todo con el apoyo de elementos de la Procuraduría General de la República (PGR), la AFI de García Luna, la Agencia Nacional de Aduanas, así como de Caminos y Puentes Federales (Capufe) y la Policía Federal (PF).

La primera forma sería a través de vuelos comerciales. En un sólo vuelo era posible transportar alrededor de 250 kilogramos de cocaína metida en maletas que eran entregadas a elementos de la Policía Federal, quienes sacaban la mercancía en las cajuelas de las patrullas. La segunda forma era por medio de aviones de carga, en los que se transportaba entre una y cinco toneladas de drogas, “dependiendo de lo que permitía el gobierno”. La droga era sacada del país a través de aduanas gracias a personal gubernamental y quienes ayudaban a descargar eran los agentes de la Policía Federal. Por último, se realizaba por medio de vuelos privados, se utilizaban pequeños jets, los cuales contaban con todos los requerimientos legales. No obstante, aclaró que en dichos vuelos no viajaban turistas, sino grandes cantidades de cocaína, la cual era guardada en un almacén propiedad de la PF en el AICM.

Sobre esto último hay que recordar lo sucedido en 2012, cuando elementos de la Policía Federal protagonizaron una balacera, contra sus propios compañeros, en la Terminal 2 del AICM, donde perdieron la vida tres oficiales. La Secretaría de Seguridad Pública (SSP) informó que el tiroteo se derivó de un operativo contra dos de sus miembros, relacionados con cárteles del narcotráfico para el trasiego de cocaína.

Y sigue la mata dando

Para ir cerrando, es casi imposible no mencionar que, durante la gestión de García Luna frente a la AFI, PF y como secretario de Seguridad Pública ocurrieron algunos escándalos, como el del tiroteo en el Aeropuerto, pero éstos fueron más del tipo dramático (montajes) en los que se exaltaban los resultados contra los grupos criminales. Uno de los más llamativos, incluso hay una serie en Netflix sobre el montaje del caso de Florance Cassez e Israel Vallarta.

La AFI se encargó de detener, acusar y encarcelar por secuestro a la ciudadana francesa, la detención que sería transmitida en vivo en un programa de Noticieros Televisa conducido por Carlos Loret de Mola, fue un hito para García Luna, pues con su aprehensión se desmantelaba una banda de secuestradores llamada “Los Zodiaco”. Ambos personajes fueron acusados de ser líderes de este grupo delictivo, aunque de ningún modo estaban vinculados a negocios ilícitos.

Otro sonado montaje fue el de Rubén Omar Romano ex director técnico del equipo de fútbol Cruz Azul, que fue secuestrado en 2005 durante 2 meses hasta que los agentes de la AFI de manera muy sorpresiva lo rescataron. Las autoridades esperaron hasta que los medios de comunicación arribaron para sacarlo del lugar en donde se encontraba.

La hipocresía de la burguesía

El caso ha llegado a su fin y aunque hasta ahora ha rodado la cabeza de García Luna, éste no fue el único que había salido ganando (aunque ahora es posible que pase el resto de su vida en una prisión estadounidense), es decir, los acuerdos a los que llegó con los narcos, no solo lo beneficiaron a él, si bien fue el operador y quién facilitaba las cosas, los frutos de sus “negocios” se repartieron entre varios sectores de la burguesía nacional e internacional.

Para iniciar, el mismo gobierno de Estados Unidos fue el que dio origen al pandillerismo que asola Centroamérica, sus agentes fueron los que de algún modo iniciaron el negocio de las drogas, pues son vitales para mantener controlada a una parte de la población en cada país o región. Mientras un sector se mantenga dentro de la burbuja de adicciones se les puede tener bajo control. Así que con ellos iniciamos con la primera dosis de hipocresía.

También es cierto que el negocio de las drogas en muy rentable, deja enormes ganancias, mismas que se repartieron de diversas formas. A una agencia de autos no le importa de dónde proviene el dinero con el que adquieren autos y camionetas de lujo, mucho menos si es de contado; las tiendas de ropa de marca tampoco se detienen a verificar el origen del dinero, a ellos solo les interesa la obtención de riqueza. Es muy probable que algunos empresarios y/o banqueros sean aliados de los narcos, es muy viable que “presten” algunos favores, que son muy bien pagados, y nuevamente sale a la luz su hipocresía, porque mientras públicamente se persignan ante las atrocidades de los narcotraficantes, en lo privado se llenan los bolsillos con dinero proveniente de la venta de drogas, dinero que de una u otra forma está manchado de sangre.

Los medios de comunicación y la casta más rancia de políticos de la derecha, también entran en la categoría de los hipócritas en el caso de García Luna. Por un lado, algunos medios de comunicación fueron sobornados por el narco, pero ahora pegan el grito en el cielo. Según el periodista Jesús Esquivel, de acuerdo con el testimonio de Héctor Villarreal, exsecretario de Finanzas de Coahuila, mencionó que pagó 25 millones de pesos al mes en sobornos al periódico El Universal. Tampoco podemos olvidar los montajes en los que TV Azteca y Televisa se vieron involucrados, pues cubrieron las “grandes hazañas” de la AFI y de García Luna. Las palabras de Rubén Omar Romano son claras: “Fue extraño, después me enteré que estaban esperando a los medios”, en el caso de Romano TV Azteca se llevó la exclusiva, mientras que la captura de los “líderes” de la banda de secuestradores “Los Zodiaco”, fue una exclusiva de Televisa.

Ahora los políticos y “amigos” de García Luna niegan cualquier vínculo o relación con él, y pues como se dice coloquialmente “el miedo no anda en burro”. La dirección nacional del PAN encabezada por Marko Cortés ha dicho que el súper policía nunca fue miembro de su partido, pero en su momento bien que coreaban sus “éxitos”. Xóchitl Gálvez que en un inicio lo defendía, alegando la poca certeza y veracidad de los testigos, ahora dice que “Celebra que se le aplique la ley”.

Todo lo anterior demuestra la debacle de la supuesta oposición que aplican la filosofía de la Chimoltrufia, “así como dicen una cosa, dicen otra”, pero dejando muy clara su hipocresía. Ya ni hablar de Calderón, que emprendió un viaje…del que quizá tenga que ser extraditado.

Conclusiones

En 2006 la burguesía en México no pensó dos veces en hacer el escandaloso fraude electoral e imponer a Calderón, para ellos era necesario que AMLO no llegará a la presidencia, no importaba los medios para poder mantener sus privilegios, aun a costa del derramamiento de sangre tan bestial del que fuimos testigos. Con Peña Nieto se mantuvo la misma política de seguridad, que también contó con miles de asesinados, con una política de represión abierta a los sectores en lucha.

Por lo tanto, no podemos decir que actualmente las instituciones heredadas a AMLO ya han sido purgadas en su totalidad, porque es obvio que se encuentran en plena putrefacción y ninguna reforma va a cambiar las cosas de fondo. Aunque actualmente AMLO diga muchas cosas sobre el caso de García Luna y, si bien no se muestra que su gobierno tenga esos vínculos y de la protección al crimen organizado como en el pasado, tampoco ha podido llevar a adelante la justicia que tanto nos prometió. Los homicidios dolosos y desapariciones continúan y la impunidad sigue siendo la regla. Más bien se ha dedicado a rescatar instituciones como el Ejército, diciendo que con una orientación moral al frente del Estado las cosas se pueden llevar de mejor manera.

Sin embargo, de buenas intenciones esta pavimentado el camino al infierno y después del triunfo electoral de 2018 los índices de violencia se han mantenido lo que es, dadas las condiciones, hasta cierto punto es normal, pues desde el gobierno de Fox, García Luna actuaba con total impunidad y en contubernio con los grupos delictivos, que supuestamente tenía que combatir. Y gracias a él, adquirieron un poder inigualable. Lo que expresa sin lugar a dudas el proceso de descomposición del Estado burgués.

Por otra parte, hay que poner sobre la mesa no sólo el papel del súper policía, ahora súper narco, sino también del Ejército Mexicano, el caso del General Cienfuegos es un ejemplo, pero hay muchos casos más en el que los que supuestamente nos “cuidan” son parte de la nómina de los cárteles de la droga, secuestradores, extorsionadores, etc. De esta forma no podemos confiar en las instituciones de la burguesía para que intervengan por los trabajadores, pues además de que no nos favorecen por los trámites burocráticos y en ocasiones costosos, sino que también están corroídas por la corrupción y el clientelismo. No basta con “darles una manita de gato”, necesitamos nuevas, unas que sí estén del lado de la mayoría, que somos los trabajadores, las mujeres y la juventud.

Debemos de exigir a AMLO y a la 4T que proceda contra Fox, Calderón y Peña, además de que se realicen investigaciones a todos los que fueron nombrados en el juicio contra García Luna, ahora hay bastantes elementos para poder ir al fondo del asunto, porque García Luna solo fue un peón, es absurdo creer que Fox o Calderón no sabían nada del actuar de un funcionario de tan alto rango. Otro aspecto relevante es la cuestión del lavado de dinero, este gobierno debe rastrear el dinero proveniente de negocios ilícitos y que fue usado en campañas electorales, y que necesariamente tuvo que pasar por la banca, porque si tuvieron éxito al “contratar” al secretario de Seguridad Pública, tal vez también fue posible meter a la nómina a algunos banqueros y empresarios, ya ni decir gobernadores, jueces, militares, marinos…

Como corolario es obligado decir que el Estado burgués mexicano esta roído hasta los huesos y está en nosotros destruirlo y construir uno nuevo, pero claro, no por la vía de las reformas, sino por medios revolucionarios.

Fuentes de información

https://www.bbc.com/mundo/noticias/2012/10/121010_mexico_mapa_guerra_narco_carteles_jp

https://www.scielo.sa.cr/scielo.php?script=sci_arttext&pid=S1659-28592015000100153

https://cnnespanol.cnn.com/2023/02/21/genaro-garcia-luna-exsecretario-seguridad-publica-mexico-orix/

https://www.redalyc.org/pdf/325/32523131002.pdf

https://politica.expansion.mx/presidencia/2022/10/26/rapido-y-furioso-la-operacion-que-pone-de-nuevo-la-atencion-en-felipe-calderon

https://www.milenio.com/policia/operacion-rapido-furioso-que-es-y-para-que-sirvio

https://www.swissinfo.ch/spa/m%C3%A9xico-eeuu_-qu%C3%A9-era-la-iniciativa-m%C3%A9rida-y-qu%C3%A9-cambia-con-el-entendimiento-bicentenario-/47014550

https://redaccion.nexos.com.mx/garcia-luna-en-brooklyn-parte-i-los-narcos-testifican/

https://www.infobae.com/mexico/2023/02/14/paso-a-paso-como-la-gente-del-rey-zambada-introducia-droga-al-aeropuerto-de-cdmx/

https://aristeguinoticias.com/0702/mexico/asi-se-entregaron-los-presuntos-sobornos-de-garcia-luna-a-el-universal-esquivel/

https://soyreferee.com/news/2021/4/7/el-otro-montaje-cuando-garcia-luna-libero-ruben-omar-romano-2327.html

https://www.infobae.com/america/mexico/2019/12/10/el-montaje-del-caso-florence-cassez-uno-de-los-actos-mas-escandalos-de-garcia-luna/

https://politica.expansion.mx/mexico/2019/12/10/quien-es-genaro-garcia-luna