Sobre llovido mojado dice el dicho popular. La brutal represión desatada en manos de la maldita policía bonaerense del gobernador Axel Kicillof y Sergio Berni -ministro de Seguridad de la provincia de Buenos Aires- en La Plata, donde se iba a jugar el partido de futbol entre Boca Juniors y Gimnasia y Esgrima, contando con un muerto, se suma a la política del Gobierno Nacional ante la comunidad mapuche Lafken Winkul Mapu, donde se ejecutó un operativo con más de 250 efectivos, carros hidrantes y camión anti tumultos. «Fue el despliegue de un Ejército invadiendo una comunidad», denunció el lonko Mauro Millán.